frances goodman - pool party - le bastart

Frances Goodman, sobre lo incontrolable femenino

Quizás sea por falta de perspectiva histórica pero da la impresión que el feminismo, cuyas fases solían medirse por olas, ya no sabe hacia donde surfear. Succionado por el torbellino neoliberal, el girl power se publicita en las pasarelas de Christian Dior y las jóvenes se zambullen cual narcisas redimidas en la fluidez digital. La basura mediática nos vende que el quid de la cuestión es debatir si es más femenina la belleza natural de pelos y estrías o la que se luce tras una sesión de maquillaje.

frances goodman - romancing mirror - le bastart
Romancing the mirror 2018. Offstage series. Lentejuelas cosidas a mano

Angela McRobbie acierta en señalar cómo la ideología de género se filtra sigilosa en la cultura popular de tal modo que las jóvenes se sienten liberadas y confiadas en su sexualidad, llegando a considerar que el feminismo es una losa del pasado, una lucha superada, a la par que repiten patrones de comportamiento prefeministas, como la ansiedad por encontrar el amor ideal.

La artista sudafricana Frances Goodman explora las paradojas de nuestra época postfeminista, a menudo partiendo de un entorno próximo, en complicidad con mujeres procedentes de un amplio espectro social: blancas, negras, jóvenes y mayores, lesbianas, prostitutas…

1. Este aspecto, la diversidad de voces, toma muchas formas en tu trabajo: sueños fallidos como sonido de fondo (The Dream), frases picantes escritas con cuentas de collar sobre asientos traseros de coches (Car seats)… A veces, la polifonía se intuye como algo subyacente (Vajazzling series). Haces aflorar deseos ocultos, pero ¿acaso podemos distinguir entre los deseos reales y los impostados, entre lo que deseamos y lo que creemos desear?

frances goodman - private dancer - le bastart
Private dancer 2018 Offstage series. Lentejuelas cosidas a mano.

Gran parte de mi trabajo trata sobre la fragilidad del deseo y la inseguridad que esto conlleva, sobre cómo pueden hacernos sentir vulnerables y expuestos. Pero el deseo es una emoción compleja y a menudo es apropiado y manipulado por sistemas de poder como los medios y las grandes estructuras corporativas para influir en nuestras elecciones e impulsos. Estamos tan empantanados por estos deseos alimentados desde fuera que es difícil escuchar nuestra propia voz a causa de puntos de vista que cambian constantemente.

Creo que esta idea se vincula con una pregunta que cada vez me planteo más: ¿qué es ser mujer? Es una palabra tan cargada, tan abrumada por la historia, la religión, la tradición, el patriarcado, la cultura y el dogma, que creo que es imposible entender lo que es una mujer despojada de todos estos conceptos proyectados. Es difícil sacudir el peso de los grilletes, incluso después de que hayan sido retirados.

frances goodman - gimme - le bastart
Gimme! Gimme! Gimme! 2018 Offstage. Lentejuelas cosidas a mano.

2. En su aspecto catártico e íntimo, dicho proyecto en el que adornaste con cuentas de cristal pubis de mujeres que respondieron a tu anuncio, me recuerda a tu último trabajo, Offstage, pues en ambos se trata de hacer para una misma algo que usualmente se luce para alguien más o por mero exhibicionismo. Bailar o actuar en ropa interior ante el espejo del cuarto de baño, dejarse fotografiar las partes más íntimas preservando el anonimato…

Creo que todo el trabajo que hago se une para formar un especie de diálogo, por lo que a menudo hay temas recurrentes e ideas que se superponen en los proyectos. Disfruto trabajando con diversos grupos de mujeres y me gusta que haya un aspecto performático y colaborativo en cada obra. Mi deseo es que los proyectos inciten conversaciones y animen a las mujeres a abrazar su feminidad, independientemente de lo que el término signifique para ellas.

frances goodman - dancing on my own - le bastart
Dancing on my own III. 2018. tul e hilo en satén

3. El sujeto siempre está sujeto, escribe Hito Steyerl, así que ¿porqué seguir creyendo que la emancipación femenina debe sustentarse en el rechazo de ser un objeto?

Creo que muchas mujeres creen que uno de los caminos hacia la emancipación es ser dueñas de sus cuerpos (una de las cosas que antes se usaba contra ellas) y eso incluye aprovechar la idea de devenir o ‘ser’ objeto para posicionarse, para afirmar sus voces, para ser vistas realmente. Si esto es una táctica consistentemente efectiva es discutible, pero me hace pensar en esta analogía: uno se dirige al cuerpo cuando ya no queda nada por colonizar. ¿Qué otra arma tienen muchas mujeres además de sus propios cuerpos?

4. ¿la subjetividad es fluctuante, como parecen indicar tus pinturas hechas de lentejuelas, donde la imagen centellea, descomponiéndose y reconstruyéndose ante nuestra mirada?

frances goodman - lickety lick - le bastart
Lickety lick 2018. Lentejuelas cosidas a mano

Creo que la subjetividad se ha vuelto más fluida, al igual que la opinión se ha vuelto más vacía con la llegada de las redes sociales y las noticias falsas. Nuestro sentido del Yo es más difícil de formular y arraigar, ya que constantemente se nos dice qué y quién somos o debemos ser, y se nos critica por lo que no somos.

Veo las lentejuelas y su efecto de espejismo como un símbolo del sentido cambiante del Yo que una mujer experimenta, pues la imagen que una mujer presenta al mundo es solo eso, una fachada, no un verdadero reflejo de las complejas emociones, deseos e inseguridades que se arremolinan bajo de la superficie.

frances goodman - the dream - le bastart
The dream (detail) 2010

5. Off-stage nos sitúa simbólicamente en una zona intersticial, un espacio privado pero a un paso del escenario, de la puesta en escena. Si por una parte muestras el baile sensual en soledad o la coquetería en el cuarto de baño como una liberación, también intuimos que no podemos escapar de la mirada voyeur, aunque sea la nuestra, una mirada interiorizada, convirtiéndonos en fetiches de nosotras mismas.

Una vez más vuelvo a las redes sociales y a cómo las personas (las mujeres sobre todo, ya que de eso trata mi trabajo) están pensando en su imagen de una manera muy diferente a los tiempos analógicos. La noción de privacidad se ha vuelto muy turbia; por ejemplo, incluso si se le envía una imagen a alguien en privado nada garantiza que permanecerá privada. Los espacios públicos y privados se están difuminando y también están cambiando las ideas sobre lo que hacemos y quiénes somos en privado versus quiénes somos en el ámbito público.

frances goodman - car seat - le bastart
He fucked like he drove. Car seats 2013. Cuentas de collar y asiento de coche

Incluso nos hemos convertido en voyeurs de nosotros mismos, siempre estamos mirando, tomando fotos, buscando encuadres, reencuadrando… La imagen que publicamos en Instagram que pretendemos sea verdadera no es más que una fabricación, una viñeta construida y cuidada de lo que queremos que la gente vea. Entonces, la cuestión de la liberación, ya sea privada o pública, es muy complicada. ¿Tal vez ese momento de aceptarte y amarte a ti misma a pesar de ti misma es liberación suficiente? ¿Tal vez ya no existe la liberación ya que nunca estaremos libres de la mirada omnipotente?

6. Cuando el armazón simbólico que sustenta la realidad se quiebra aflora lo “real”, entendido por Lacan como la parte más inescrutable de nuestros miedos y nuestra libido, lo irrepresentable. ¿Podríamos decir que lo “falso” (extensiones cosméticas, uñas postizas…) te sirve a ti para revelar lo “real”? Centenares de uñas dando forma a criaturas inquietantes (emparentadas con los súcubos, melusinas, plantas carnívoras…) que encarnan una feminidad temida, mitificada por la psique masculina.

frances goodman - till death - le bastart
Till Death Us Do Part. Revenge series (capote coche, remaches pop, leds, diamantes)

Siempre me ha interesado cuán fina es la línea entre lo deseable y lo grotesco, y más específicamente, cómo el momento en que una mujer reclama su sexualidad y la articula, ya sea a través de sus palabras o acciones, cruza cierta línea invisible y se vuelve casi monstruosa y peligrosa para muchos (por ejemplo, la estrella de hip-hop Nicki Minaj). Me gusta pensar que utilizo estos materiales falsos (pestañas postizas, uñas, maquillaje) que usamos como adornos, máscaras y armaduras, de una manera iluminativa, como tú dijiste, para revelar lo real. Quiero que la gente se cuestione la incomodidad que siente cuando mira la parte abyecta de lo seductor, para tratar de abrazar esta monstruosa feminidad que se nos ha enseñado a temer. Porque se nos enseña a temerlo por el conocimiento de que es poderoso e incontrolable. A menudo explico que lo que estoy investigando es lo incontrolable femenino.

frances goodman - succubus - le bastart
Succubus 2016 Nail sculptures. Uñas postizas

7. De hecho, la idea del otro y los temores a él asociados está presente en varias de tus obras, no sólo la visión masculina de la mujer como extraña criatura mítica, también la que se forja en el imaginario femenino acerca de la masculinidad, o entre grupos sociales… La compleja realidad social de tu país debe haberte influido en tu visión de la violencia latente en las relaciones humanas, ¿es así?

Creo que los sudafricanos tienen una psique violenta y traumatizada debido a nuestro pasado cargado y nuestros sentimientos no reconciliados en torno a esta historia. Creo que este trauma y violencia heredada reside en mi trabajo de una manera implícita. Dicho esto, tengo que reconocer que ocupo una posición muy privilegiada como sudafricana blanca y no pretendo hablar por el trauma de los demás. Esta es una de las razones por las que no hago un trabajo específicamente relacionado con la política y las condiciones sudafricanas.

La otra razón es porque creo que la violencia latente en las relaciones humanas es más profunda y amplia que esta historia específica. El patriarcado blanco es intrínsecamente violento y desdeña al Otro, y creo que este es un tema que continuamente nutre mi trabajo, ya sea intencional o inferido.

Entrevista a cargo de Anna Adell

frances goodman - hoop dancer - le bastart
Hoop dancers (installation view)

 

 

La exposición de Frances Goodman, Offstage
puede visitarse en SMAC Gallery, Johannesburgo, Sudáfrica
hasta el 13 de octubre de 2018

 

 

 

 

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